Introducción
Propósito de esta publicación
En marzo de 2006 se publicó la guía del curso actual de Teoría del Conocimiento (TdC), cuya primera evaluación tuvo lugar en mayo de 2008. Este curso es el resultado de un proceso de revisión que se concentró principalmente en la evaluación y que reconocía una serie de dificultades en el curso anterior. Tras poner a prueba tres modelos diferentes, se formularon cuatro nuevos criterios de evaluación para el ensayo de la evaluación externa.
Los ensayos y los comentarios que incluye esta publicación tienen como finalidad aclarar cómo funcionan en la práctica los criterios de evaluación para este componente. Los ensayos son de la primera convocatoria —mayo de 2008— y van acompañados de comentarios de examinadores supervisores donde se explican las notas concedidas.
Nuevos criterios para la evaluación externa
Aunque los cuatro nuevos criterios de evaluación se crearon para presentar mejor los elementos de los seis criterios anteriores, el resultado ha sido un importante cambio de enfoque, especialmente en el criterio B (Perspectiva del actor del conocimiento). Este criterio combina elementos de varios de los criterios antiguos, pero pone un mayor énfasis en cómo aborda el alumno las cuestiones de conocimiento. Los nuevos criterios han sido muy bien recibidos, por ser más claros y “transparentes” a la hora de aplicarlos.
En todo sistema de evaluación se debe encontrar el equilibrio justo entre validez y fiabilidad. Por validez se entiende que el sistema permita medir aquello que se debe medir (y, en este caso, también que fomente buenas prácticas en el aula). La fiabilidad hace referencia a que, usando el sistema, se obtengan correcciones coherentes, independientemente de cuándo se realicen y de quién las realice. El grupo de revisión del currículo que tuvo a su cargo la formulación de los nuevos criterios hizo un gran esfuerzo por preservar la validez de la evaluación en TdC. Otro de sus objetivos fue mejorar la fiabilidad, pero esto no resultó fácil. La evaluación de ensayos es siempre complicada y, posiblemente, el de TdC sea más difícil de evaluar que otros: es, per se, complejo y carece del elemento “estabilizador” de un contenido fáctico determinado, como el que tendría la respuesta a una pregunta de un examen de Historia o Economía, por ejemplo.
No obstante, a pesar de algunas percepciones en contra, se ha constatado que la exactitud de las calificaciones previstas por los profesores de TdC es comparable a la de otras asignaturas (más del 40% son exactas y en más del 90% de los casos el margen de error es de una calificación). Esto indica que la evaluación del curso en general es bastante más fiable de lo que a veces se supone.
Presentación del material
Este material de ayuda al profesor está disponible en español, francés e inglés, y cada versión incluye, al menos, un ensayo por cada calificación. Como no se consideró apropiado traducir el trabajo de los alumnos, los ensayos y comentarios son diferentes en cada lengua. Los profesores que tengan conocimiento de varias de estas lenguas pueden consultar los trabajos disponibles en dichas lenguas.
Se ha omitido el nombre de los alumnos en los ensayos. Estos se presentan en su formato original, salvo por la numeración de las líneas, que se ha añadido para facilitar la referencia.
A título informativo, las cinco calificaciones para los ensayos de TdC, con los rangos de puntuación correspondientes fijados en mayo de 2008, son las siguientes:
A |
Excelente |
30-40 puntos |
B |
Bueno |
23-29 puntos |
C |
Satisfactorio |
17-22 puntos |
D |
Mediocre |
11-16 puntos |
E |
Elemental |
0-10 puntos |
Cómo utilizar este documento
Este documento puede utilizarse de varias maneras. Si lo desea, puede leer uno o dos ensayos con sus respectivos comentarios y después corregir otros para ver si sus calificaciones se asemejan a las de los examinadores. También puede pedir a sus alumnos que califiquen uno o dos ensayos, para ayudarles a comprender mejor qué es lo que deben intentar conseguir, o evitar, en sus propios ensayos.
Nos sorprendería mucho que estuviera de acuerdo con todos los comentarios presentados aquí. Sin embargo, esperamos que demuestren un enfoque coherente y con fundamento. Nos interesa saber si este documento le ha resultado útil y, en tal caso, cómo lo ha utilizado. Si tiene algún comentario sobre el mismo, o si desea sugerir algún cambio al sistema de evaluación, diríjase al foro de debate de TdC en el Centro pedagógico en línea (CPEL).
Trabajos evaluados
Para ver las distintas partes de este ensayo, utilice los iconos de la derecha.
Sumario
Ejemplo 1
Comentarios del examinador
Calificación otorgada: A
Criterio A |
10 |
Criterio B |
9 |
Criterio C |
9 |
Criterio D |
10 |
Total |
38 |
Este es un ejemplo sobresaliente de un ensayo contundente, personal y conciso. Da muestras de lo mucho que se puede decir respecto de una cuestión de conocimiento en 1.600 palabras. Se centra en lo indicado en el título y construye su respuesta guiada por la evaluación del papel de la intuición en distintas áreas de conocimiento, con un análisis claro y convincente que considera diferentes perspectivas además de la propia. Establece conexiones entre áreas y formas de conocimiento de manera fluida y utiliza ejemplos frescos y pertinentes.
Criterio A: Comprensión de las cuestiones de conocimiento
Puntuación otorgada: 10
El ensayo está permanentemente centrado en cómo entender la intuición como un modo de conocer (líneas 7-16), en el papel de la intuición en las áreas analizadas (l. 18-65), en la posibilidad de entrenar la intuición en conexión con los límites de la razón (l. 67-109) y en la invención (l. 111-134). A lo largo del desarrollo el ensayo muestra una profunda comprensión, por ejemplo, de la naturaleza de las matemáticas y su necesidad de una “argumentación rigurosa y formalizada” (l. 25) donde la intuición no tiene cabida, lo cual defiende con un ejemplo personal acertado (l. 30 ss.). A continuación, hace una buena comparación entre intuición y método de demostración lógica (l. 19-26), que después considera de forma sofisticada al enlazar también con las matemáticas en el ejemplo final (l. 75-84).
Criterio B: Perspectiva del actor del conocimiento
Puntuación otorgada: 9
El ensayo contiene varias muestras de reflexión independiente sobre el alcance de la intuición como forma de conocimiento, que se aprecian en la configuración del ensayo y los ejemplos variados, pertinentes y eficaces. La forma en que se han vinculado las cuestiones de conocimiento con la experiencia personal es ejemplar. El ejemplo del problema analizado en las líneas 28-38 cita de forma explícita la propia experiencia como actor de conocimiento y cómo, gracias a la práctica, utilizamos la intuición y sabemos qué hacer “sin tener que pensar demasiado” (l. 83). Además, se tienen en cuenta diferentes perspectivas respecto de la evaluación de la intuición, aunque no están lo suficientemente realzadas.
Criterio C: Calidad del análisis de las cuestiones de conocimiento
Puntuación otorgada: 9
El ensayo se ubica claramente en una perspectiva de indagación que el alumno mantiene de forma permanente. Así, por ejemplo, el análisis de los ejemplos de la demostración en matemáticas (l. 18-38) y de la teoría de la gravedad en relación con la intuición (l. 40-48) llevan a una conclusión cuyo carácter provisional y parcial se reconoce explícitamente en la afirmación “Hasta ahora parece claro que la razón invalida la intuición, pero no todo es tan sencillo”(l. 48-49). Ello da pie al inicio de una contraargumentación, donde se indican los límites de la razón y la posibilidad de entrenamiento de la intuición (l. 51-73). De manera oportuna y pertinente se señalan algunas implicaciones, por ejemplo, al discutir sobre la confianza ciega en la razón (l. 55 s.). No obstante, faltó profundizar más en las implicaciones.
Criterio D: Organización de las ideas
Puntuación otorgada: 10
El ensayo está muy bien estructurado y organizado, empezando por una introducción clara y concisa. Los conceptos se utilizan claramente, y están precisados donde corresponde con explicaciones útiles; así, define intuición (l. 13), añadiendo más tarde que es el mecanismo que lleva a cabo la “preselección de ideas que se combinan para producir algo nuevo” (l. 120-121). Se citan las fuentes de información e ideas, y todas las referencias permiten ubicar las fuentes. El pie de página explicativo en la página 2 es aceptable, porque no es necesario para el ensayo en sí. Es importante tener en cuenta que este es un recurso que utilizan los alumnos frecuentemente para explicar algo sin que entre en el recuento de palabras del ensayo. Además, no se espera que los examinadores lean los pies de página. Por tanto, se recomienda evitarlos ya que su uso generalmente es desventajoso. Se ha respetado el límite de palabras. La información utilizada para respaldar argumentos es correcta.
Ejemplo 2
Comentarios del examinador
Calificación otorgada: A
Criterio A |
8 |
Criterio B |
9 |
Criterio C |
8 |
Criterio D |
8 |
Total |
33 |
Este es un trabajo ágil y perspicaz que demuestra una buena comprensión del título guiada por el análisis de ejemplos. Parte de la idea de que los nuevos descubrimientos nos permiten ampliar nuestra gama de conocimientos y estos son los que nos brindan una “comprensión más completa y acertada de la realidad” (línea 5). A continuación, el alumno añade que, en algunas ocasiones, hay que dejar atrás el conocimiento previo para aceptar el nuevo (l. 5-6). La conexión de estas ideas con el título se explica de forma explícita en el segundo párrafo (l. 11-18). El argumento se desarrolla de manera clara y eficaz, por lo que el ensayo merece una A.
Criterio A: Comprensión de las cuestiones de conocimiento
Puntuación otorgada: 8
El ensayo demuestra buena comprensión de las cuestiones de conocimiento tratadas. Así, por ejemplo, considera cómo modificamos nuestro punto de vista sobre hechos pasados (l. 25-29), puntualiza eficazmente cómo el conocimiento del presente influye en el cambio de la comprensión del pasado (l. 32-36) y concluye con un problema más complejo sobre la concepción del conocimiento matemático (l. 105-109). Al tratar las ciencias naturales, demuestra cómo se lleva a cabo el “cambio de ortodoxia” (l. 69) para luego explicar cómo “verdaderas teorías completamente contradictorias a las sostenidas anteriormente” (l. 86-87) llegan a ser aceptadas. Sin embargo, no elabora el concepto tan fuerte de “herejía” del título. Intenta relacionar y comparar las tres áreas de conocimiento que aborda (en las líneas 67-68 introduce una comparación de las áreas mediante una pregunta y en l. 110-112 y l. 121-125 manifiesta que el cambio no se da de la misma forma en las distintas áreas de conocimiento), aunque sin llegar a justificar enteramente estas afirmaciones.
Criterio B: Perspectiva del actor del conocimiento
Puntuación otorgada: 9
El ensayo contiene suficientes muestras de reflexión independiente en la configuración general y en el tratamiento de cada una de las áreas de conocimiento. Los ejemplos son variados y se utilizan de manera eficaz. El ejemplo del hundimiento del acorazado Maine (l. 41-61) se introduce señalando qué se quiere mostrar con él, luego se presenta de manera sucinta y eficaz, y se retoma en el párrafo siguiente (l. 62-66), estableciendo la perspectiva personal y mostrando su conexión con el título a modo de conclusión. Esta es una muy buena muestra de cómo proceder con los ejemplos. Cabe resaltar la perspectiva personal del alumno en el ejemplo de los números primos, oponiéndose a la idea de que el conocimiento matemático no cambia o progresa (l. 98-104). Es un ejemplo que no cae en los estereotipos comunes a los que se recurre habitualmente. Si bien recurre a un ejemplo común (la evolución de las especies, l. 69-87), lo trata de manera eficaz y pertinente. La perspectiva personal también se aprecia en la formulación de buenas preguntas (l. 19-23).
Criterio C: Calidad del análisis de las cuestiones de conocimiento
Puntuación otorgada: 8
Las cuestiones de conocimiento se han indagado con perspicacia, profundidad y detalle.
Los argumentos son coherentes y se justifican los puntos principales, por ejemplo, al indicar que la concepción de que las matemáticas siempre son verdaderas nos impide ver que también en las matemáticas nos podemos equivocar “fortaleciendo la ortodoxia” (l. 105-109). Algunos puntos, sin embargo, quedaron sin explicación, como la afirmación de que la historia es diferente a otras áreas por su “movimiento constante” (l. 121-122). Igualmente, en la conclusión se resalta que el conocimiento científico es “falible” (l. 134), pero no se aclara este punto. Hay contraargumentaciones específicas, como en el caso de las matemáticas (l. 98-104), pero algunos comentarios que invitaban a la contraargumentación se quedaron cortos; por ejemplo, dice que “el creacionismo, se fue erosionando lentamente” (l. 82), pero no considera si realmente es así o si, a pesar de las evidencias, el proceso de cambio es tan lento, una idea que repite pero que no desarrolla. Se identifican implicaciones de la argumentación al final del ensayo, cuando nombra las limitaciones de ciertas áreas (matemáticas y ciencias naturales) en el penúltimo párrafo.
Criterio D: Organización de las ideas
Puntuación otorgada: 8
El ensayo está bien estructurado y organizado. Los conceptos se utilizan y desarrollan de forma clara, con adecuadas explicaciones cuando resulta apropiado, por ejemplo, “las matemáticas son […]” (l. 89-90). El alumno comienza el ensayo explicando su interpretación del título y definiendo ortodoxia de manera personal, simple y eficaz (l. 11-13), pero no explica convincentemente el concepto de “herejía”, pues solamente indica que es una “falsedad” (l. 15). Hay ideas que quedan sin explicación, como la de los dogmas “plagados de sofismas” (l. 19-21). Considera primeramente la historia como el mejor ejemplo de notable cambio en la ortodoxia (l. 24-40) para pasar luego a las ciencias naturales y las matemáticas, llegando a la conclusión final y su acuerdo con el título prescrito. La información es correcta y se aprecia una clara investigación para fundamentar los puntos claves del ensayo. Se han citado las fuentes de información e ideas; las referencias permiten ubicar las fuentes. Se ha respetado el límite de palabras.
Ejemplo 3
Comentarios del examinador
Calificación otorgada: B
Criterio A |
7 |
Criterio B |
7 |
Criterio C |
6 |
Criterio D |
6 |
Total |
26 |
Este es un buen ensayo, aunque promete más de lo que cumple. Empieza con una introducción clara y con una dirección pertinente, pero se va desdibujando. Logra hacer conexiones entre lo social/ambiental y lo biológico y equilibra bien estas dos partes. Si bien es un ensayo personal en su forma de contrastar psicología y biología, no llega a profundizar lo suficiente
Criterio A: Comprensión de las cuestiones de conocimiento
Puntuación otorgada: 7
El ensayo se centra en cuestiones de conocimiento pertinentes al título, pero falta desarrollar las ideas. Se aprecia claramente una profunda comprensión en la comparación entre áreas de conocimiento (líneas 24-29), donde un fenómeno central en física (el desprecio de la fricción del aire) es empleado para hacer comprender lo que ocurre en el conocimiento científico del ser humano (el desprecio del contexto). Se puede apreciar un contraste entre dos áreas de conocimiento a lo largo de todo el escrito, denotando cierta eficacia y una clara identificación de las cuestiones de conocimiento, como en la psicología científica (l. 13-16). En otra ocasión dice que “la cuestión es saber qué tanta información podemos obtener de las novelas” (l. 67) y, desafortunadamente, en ningún momento considera el concepto de “aprendemos” de la pregunta y se limita a equipararlo con captar información.
Criterio B: Perspectiva del actor del conocimiento
Puntuación otorgada: 7
Se observa una perspectiva personal bastante fuerte en la forma en que el alumno acomoda todos los elementos del ensayo. El matiz con que se aborda el título para indagar cómo de cierto puede ser y “en qué contextos se puede aplicar” (l. 9), indica una aproximación personal. La referencia al contexto es el hilo conductor de la perspectiva personal, por ejemplo, al afirmar que en las ciencias se desprecia el contexto (l. 25) y “todo aquello que rodea al individuo” (l. 25-26), pero que las novelas dan un contexto determinado (l. 41). Sin embargo, estas perspectivas no se evalúan lo suficiente. El ejemplo hipotético (l. 53 ss.) resulta superficial, al igual que la consideración de los personajes de las novelas, pues al decir que estas obras, “generalmente para ganar público, exageran un poco el dramatismo de la vida cotidiana” (l. 82-83) demuestra falta de conocimiento sobre la naturaleza de las novelas.
Criterio C: Calidad del análisis de las cuestiones de conocimiento
Puntuación otorgada: 6
Se ha indagado con perspicacia, cierta profundidad y detalle, y los argumentos son coherentes. En general, se trata de justificar los puntos principales, pero no de forma totalmente eficaz, como se aprecia en las líneas 53-66, donde no llega a dar la justificación que anuncia. El análisis del carácter y del temperamento, que comienza en la línea 91, más que profundizar se concentra en la distinción entre ambos. Esto hace difícil ver la pertinencia de la pregunta aun cuando concluya, tratando de ordenar las ideas, que uno pertenece a la novela y el otro a la psicología científica (l. 112-113). Hay una contraposición de visiones entre el enfoque científico y el de las novelas, pero sin exploración explícita de contraargumentos. Incluye una buena pregunta sobre las ciencias en relación con el conocimiento del ser humano (l. 20-22), pero luego, al hablar de la ciencia y decir que se desprecia el contexto, cae en generalizaciones típicas que denotan falta de indagación. Igualmente, cuando considera las novelas y los diversos comportamientos y personalidades que en ellas están justificados “desde un punto de vista más abstracto” (l. 40-41), no aclara ni da ejemplos para respaldar este punto. Hay partes que no van más allá de lo descriptivo, como el ejemplo de la obra “La Mujer Rota” (l. 69 ss.).
Criterio D: Organización de las ideas
Puntuación otorgada: 6
El ensayo está bien estructurado, la organización general es clara y sigue una continuidad argumentativa (por ejemplo, l. 53 ss.). La inclusión de explicaciones apropiadas facilita la comprensión, así como la definición personal de psicología científica (l. 10-12) y la caracterización de la novela como “un conjunto de experiencias humanas” (l. 35), lo cual, además, es eficaz por su potencial como aproximación de conocimiento. Sin embargo, luego habla de la novela de forma demasiado vaga, indicando que su primer objetivo es el entretenimiento, seguido “de la intención particular de cada escritor” (l. 47-49), sin explicar ni dar ejemplos. La información fáctica utilizada para respaldar los argumentos es, en general, correcta. Al hablar de medicina, en realidad se refiere a psiquiatría, lo que parece sugerir que se basa en sus propios preconceptos en varias ocasiones. Se han citado las fuentes de información e ideas, aunque las referencias no están completas (falta, por ejemplo, la definición de carácter en la línea 100). Además, utiliza una fuente poco confiable (“www.rincondelvago.com”), se espera el uso de fuentes de más calidad. Se ha respetado el límite de palabras.
Ejemplo 4
Comentarios del examinador
Calificación otorgada: C
Criterio A |
5 |
Criterio B |
6 |
Criterio C |
4 |
Criterio D |
5 |
Total |
20 |
Este es un ensayo bastante representativo de esta calificación. Su estructura es adecuada y hace un recorrido por las áreas de conocimiento para asegurarse de responder a la pregunta. Es pertinente y sí responde a la pregunta, aunque de manera bastante general y limitada, faltándole profundidad al análisis y amplitud a las justificaciones.
Criterio A: Comprensión de las cuestiones de conocimiento
Puntuación otorgada: 5
En este ensayo se percibe un intento de trabajar con las cuestiones de conocimiento, empezando por la afirmación de que las formas de conocimiento trabajan conjuntamente para la adquisición del conocimiento (línea 3). Plantea que el lenguaje, por su naturaleza abstracta, nos lleva a diversas interpretaciones, lo cual es una cuestión de conocimiento central, pero el ensayo no va más allá de identificar las cuestiones de conocimiento. La clasificación de las áreas de conocimiento basándose en el lenguaje no está bien comprendida, ya que determina que las ciencias y las matemáticas utilizan el lenguaje formal (l. 14-17), mientras que la literatura y la historia utilizan un lenguaje ambiguo (l. 31-32). Además de lo anterior, no relaciona la literatura con las otras artes, lo que hace que no haya conexiones tan eficaces.
Criterio B: Perspectiva del actor del conocimiento
Puntuación otorgada: 6
Este es el punto más fuerte del ensayo. Contiene muestras de reflexión independiente y hay un tratamiento personal (el alumno incluye un buen ejemplo de su contexto cultural, l. 52 ss.). Sin embargo, a este tratamiento le falta profundidad. Presenta la perspectiva de que el lenguaje posee la misma importancia en todas las áreas (l. 8-9) aunque no de la misma manera, indicando, por ejemplo, que el lenguaje en literatura es más ambiguo, lo que permite un mayor rango de expresión, interpretación y significado de los conceptos (l. 33-34). Continúa diciendo que esta área de conocimiento va más allá del lenguaje mismo, pero sin explicar lo que quiere decir ni dar ejemplos que lo justifiquen (l. 56-57). El ensayo muestra conciencia de varias perspectivas, pero su exploración no es eficaz. Los ejemplos de matemáticas e historia son eficaces, pero en ciencias solamente se refiere a la denominación de algunos términos, en literatura habla de la novela de Orwell y en ética de lo políticamente correcto. Esto ayuda a entender que existe una perspectiva del actor del conocimiento, pero no la explora.
Criterio C: Calidad del análisis de las cuestiones de conocimiento
Puntuación otorgada: 4
Se han indagado parcialmente las cuestiones de conocimiento, pero falta profundidad en las justificaciones. Se hace un buen comentario sobre el lenguaje políticamente correcto que empleamos para cambiar la mentalidad, preguntándose hasta qué punto es efectivo (l. 75-77). Describe la sociedad distópica en el ejemplo de 1984, pero no hay análisis ni se relaciona la obra de ficción con la realidad. El enfoque del área de historia es superficial y confuso; dice, por ejemplo, que el lenguaje se muestra subjetivo porque nos transmite los acontecimientos de un hecho real (l. 48-51). Aquí y en otras partes la pertinencia de lo que dice es cuestionable y falta justificar las ideas. En varios casos, como al hablar de la ciencia, se nota el uso de los preconceptos del alumno. Hay pocas muestras de contraargumentación. Igualmente, no se identifican las implicaciones, por ejemplo, al decir que un mismo hecho histórico se puede llamar de diferentes formas como “golpe de estado” o “pronunciamiento militar” (l. 55-56).
Criterio D: Organización de las ideas
Puntuación otorgada: 5
El ensayo tiene una buena introducción y está satisfactoriamente organizado y estructurado en general. El alumno simplifica ciñéndose al recorrido de las áreas, lo que limita las posibilidades de una argumentación crítica. Si bien el lenguaje es claro, las explicaciones no son siempre adecuadas. No hay muestras de la consulta de fuentes. Hay un error fáctico al decir que Orwell es estadounidense (l. 42) y el alumno no explica por qué es “éticamente incorrecto” (l. 71) (además de políticamente incorrecto) en Estados Unidos referirse a los afroamericanos como “negros”. Algunas de las menciones en la bibliografía están incompletas. Se ha respetado el límite de palabras.
Ejemplo 5
Comentarios del examinador
Calificación otorgada: D
Criterio A |
3 |
Criterio B |
5 |
Criterio C |
3 |
Criterio D |
4 |
Total |
15 |
En este ensayo se aprecia una cierta estrategia general. El alumno comienza definiendo “verdad” y “contexto” (líneas 2-7), establece una posición personal respecto de la afirmación del título (l. 19-21), recorre las áreas de conocimiento (l. 29-69) y conecta la afirmación del título con las formas de conocimiento (l. 71-99), para concluir con una consideración de la relación entre contexto y verdad (l. 106-132). Hace este recorrido sin detenerse en cada paso, haciendo uso de un esquema común (aparente en la falta de originalidad y frescura en el trabajo). El enfoque básico es adecuado, pero las justificaciones y el análisis son débiles. Presenta demasiados ejemplos que sustituyen su argumentación.
Criterio A: Comprensión de las cuestiones de conocimiento
Puntuación otorgada: 3
El ensayo demuestra una comprensión rudimentaria de las cuestiones de conocimiento pertinentes al título prescrito. El alumno identifica algunas cuestiones de conocimiento en áreas de conocimiento (historia, ciencias naturales, ciencias sociales y humanas y matemáticas) a través de ejemplos, pero no establece relaciones fuertes ni adecuadas.
Hay cierta conexión de la afirmación del título con las formas de conocimiento: con la emoción en los ejemplos de la muestra de afecto y la guerra (l. 71-79); con el lenguaje (l. 81-89), la razón (l. 89-95) y la percepción sensorial (l. 95-99); pero en todos los casos se queda en un plano descriptivo o no va más allá de meras menciones. A partir de la línea 40, hay una consideración superficial sobre Picasso y los Beatles, sin demostrar una buena relación con el concepto de contexto ni con cuestiones de conocimiento. El ejemplo siguiente sobre la velocidad de reacción en las ciencias naturales es un poco mejor, pero queda como definición de contexto y no se consideran las cuestiones de conocimiento pertinentes a él.
Criterio B: Perspectiva del actor del conocimiento
Puntuación otorgada: 5
El ensayo contiene algunas muestras de reflexión independiente. La afirmación formulada en las líneas 19-21 refleja una interpretación propia de la afirmación del título, sin indicar si la comparte o no, o si es convincente o no. El ejemplo que da a continuación (l. 21-27) es un intento de justificación cuya idea central se entiende, si bien está expresada inadecuadamente. En general, los ejemplos elegidos como justificación de la interpretación son adecuados y pertinentes para presentar cuestiones de conocimiento. Por ejemplo, en el área de historia, menciona la 1º Guerra Mundial y la expulsión de los judíos; en arte, el Guernica y los Beatles (l. 29-51). Sin embargo, los intentos de explorarlos son pobres y la variedad de ejemplos no suple la falta de reflexión.
Criterio C: Calidad del análisis de las cuestiones de conocimiento
Puntuación otorgada: 3
La argumentación tiene cierta coherencia, pero, si bien lo intenta en general, no analiza lo que dice. Hay contradicciones en los ejemplos que presenta. Por ejemplo, con respecto a las matemáticas, afirma que toda matemática tiene supuestos y después afirma que los números no están condicionados (l. 69). Lo mismo sucede al hablar de la guerra, cuando afirma que las partes implicadas no se odian y luego habla de la xenofobia, creando confusión. Hay puntos importantes del ensayo que no están justificados, por ejemplo al tratar la razón (l. 93-95) y “todo lo que tiene que ver con el hombre es inexacto” (l. 61-62); o que se reducen a una mención, como en el caso de la percepción sensorial (l. 97-99). Existe cierta identificación de implicaciones (l. 101-104), pero no se exploran. No se consideran contraargumentos.
Criterio D: Organización de las ideas
Puntuación otorgada: 4
El ensayo está suficientemente estructurado y tiene una organización general adecuada. Se entiende lo que el alumno quiere decir, así como los conceptos que utiliza. Sin embargo, salta de una idea a otra sin desarrollarlas (como, por ejemplo, entre las líneas 60 y 100). Cuando explica los conceptos, las explicaciones son generalmente adecuadas, por ejemplo, al referirse a verdad y contexto (l. 2-7) y en su definición de contexto, entendido como que no es lo mismo quitarle la libertad a un delincuente que a un “ciudadano normal y corriente” (l. 22). El ensayo no da referencias cuando se requiere. Cuando dice que el Guernica es el cuadro que “mejor representa la historia del siglo XX” y es el “máximo exponente del movimiento cultural de la época” (l. 43-44), no dice según quien —aparte de que estas son afirmaciones discutibles—. En el párrafo que empieza en la línea 29, la información que da sobre la guerra y la expulsión de los judíos debería ir acompañada de sus referencias, al igual que la biografía de Atwood (l. l9 ss.). Vale la pena recalcar, ya que es algo que se encuentra a veces en los ensayos, que no es pertinente ni adecuado dar este tipo de información.
Ejemplo 6
Comentarios del examinador
Calificación otorgada: E
Criterio A |
2 |
Criterio B |
1 |
Criterio C |
2 |
Criterio D |
3 |
Total |
8 |
Este es un ensayo muy pobre, sin dirección, y que no relaciona la pregunta con las cuestiones propias de TdC. Decide emplear un enfoque descriptivo, dando preferencia a las teorías éticas, pero no las maneja acertadamente. Este ensayo es un ejemplo de la dificultad que supone tratar los títulos dedicados a la ética con un enfoque apropiado a TdC que identifique cuestiones de conocimiento. Es representativo de muchos ensayos sobre ética y, por tanto, cabe mencionar que para muchos alumnos escribir un ensayo de estas características es difícil, pues consideran que cualquier cosa que escriban, si trata de ética, se va a considerar adecuado, lo cual no es cierto.
Criterio A: Comprensión de las cuestiones de conocimiento
Puntuación otorgada: 2
El ensayo intenta abordar el título desde las formas de conocimiento y las cuestiones de conocimiento, pero no es eficaz. Este intento se observa, por ejemplo, en el párrafo que empieza en la línea 20. La idea de la importancia de valorar “emocionalmente la opción buena o mala” (línea 54) para poder tomar una buena decisión podría ser pertinente, pero no la analiza ni la considera a través de las áreas de conocimiento. Como en el resto del ensayo, no va más allá de insinuar posibilidades y no demuestra comprensión del título prescrito. Tampoco hay justificación de las ideas, pues no hay conexiones con las áreas o formas de conocimiento, a lo más hay menciones. El alumno intenta explorar la diferencia entre ética y moral, indicando que la ética incluye enjuiciamiento (l. 97), pero más que una cuestión de conocimiento aquí se estaría viendo la problemática de la ética. Sí hace una buena pregunta al considerar si es mejor decirle la verdad a alguien aunque le pueda lastimar o “mentirle para que no sufra” (l. 83-84), pero lo único que responde al respecto es que se deben considerar las formas de conocimiento para tomar una decisión.
Criterio B: Perspectiva del actor del conocimiento
Puntuación otorgada: 1
Este ensayo realmente no contiene muestras de reflexión independiente pertinentes al título prescrito. Se presenta información general que no llega a ser una elaboración personal. Los ejemplos son muy pobres y son generalidades: “científicos han observado” (l. 48), “muchas películas” (l. 71), “alguien puede tener el capricho” (l. 42-43) y son hipotéticos. El ejemplo de las “mentiras blancas” (l. 82) podría ser apropiado, pero no va más allá de mencionar que las mentiras blancas presentan un problema. No se ha intentado explorar diferentes perspectivas.
Criterio C: Calidad del análisis de las cuestiones de conocimiento
Puntuación otorgada: 2
Existe un intento de indagación muy limitado, por ejemplo, al analizar la emoción y la razón como factores que configuran las decisiones morales. Sin establecer ninguna relación con la pregunta, habla de “felicidad” y “decisión” (l. 36 ss.) citando la obra de Savater y de Aristóteles, en un intento de justificar por qué usar la emoción (Aristóteles) y por qué hay que tener cuidado al hacerlo (Savater). El ejemplo del pastel de chocolate (l. 43) pretende hacer una contraposición entre la felicidad inmediata y el beneficio a largo plazo, pero es superficial e irrelevante en lo que respecta a las decisiones morales. Igualmente, al presentar el instinto como opuesto de las formas de conocer (l. 58) no se entiende claramente por qué lo dice ni por qué es pertinente. Las ventajas y las desventajas de hacerle saber al paciente su situación (l. 72-73) podrían considerarse como una decisión moral, pero una vez más queda como algo superficial (y de ficción) al afirmar simplemente que se deben considerar ambas formas de conocimiento “debido a que (el personaje) es capaz tanto de sentir como de razonar” (l. 77).
Criterio D: Organización de las ideas
Puntuación otorgada: 3
La organización general de este ensayo es limitada. Se indican o inician cuestiones pero estas quedan sin precisar o resolver. El alumno no elabora una introducción pertinente a la pregunta y el último párrafo (l. 87-99) no es conclusivo, sino que agrega contenido. El ensayo queda, así pues, sin conclusión. El primer párrafo es muy confuso. Define la moral de forma imprecisa (l. 4-5), y también hay imprecisión en la expresión “situaciones un poco desfavorables” (l. 69-73) para calificar las enfermedades terminales.
El alumno salta de una idea a otra, hablando sobre la libertad, la felicidad, la ética en general, el instinto, el hecho de que adquirimos las formas de conocimiento de diferentes maneras y –otras ideas bastante cuestionables, en general irrelevantes y no justificadas. Habla de toma de decisiones en general, pero no de decisiones morales, excepto por insinuación.
En general se entiende lo que dice, pero hay expresiones que o no ayudan o no se entienden (como en l. 65-67). Las referencias están incompletas (O. Paz, l. 18; Savater, l. 40, “Inteligencia emocional”, a pie de página) o no las hay, como en el caso del concepto de felicidad en Aristóteles (l. 32) y “científicos han observado”(l. 48).